Durante los meses de junio y julio, el equipo de Imagina Madrid estuvo recorriendo los nueve lugares elegidos para ser intervenidos durante esta primera edición del programa.

Conscientes de que Imagina Madrid es una nueva propuesta que genera muchos interrogantes, pensamos que no hay nada mejor que acercarse a cada uno de los espacios para poder contarlo. Queríamos presentarnos  y sobre todo, queríamos conocer los lugares y el vecindario que lo habita: si vamos a trabajar juntas para transformar estos lugares, primero necesitamos saber de su historia, su particularidades y sus dinámicas.

Tras una lluvia torrencial, el cielo se despejó regalándonos un doble arcoíris con el que comenzar la presentación de Imagina Madrid en los Jardines de las Brigadas Internacionales en Vicálvaro. Comenzamos con cierto retraso pero pronto la plaza se llenó de gente, muchos vecinos y vecinas quisieron saber qué estaba ocurriendo allí.

Los Jardines de las Brigadas Internacionales son un punto central y neurálgico del distrito de Vicálvaro y, en concreto, del barrio del Casco Viejo, ese “barrio tan barrio”, “barrio de toda la vida”, casi “como un pueblo” que señalan sus vecinos. Están rodeados por varias instituciones -Universidad Rey Juan Carlos, un centro de mayores, una escuela infantil y una oficina de la Agencia para el Empleo- y supone la principal zona comercial del Casco Viejo. La cercana boca de Metro de Vicálvaro y varias líneas de autobuses hacen de este lugar un nodo de comunicaciones del distrito y de mucho tránsito. El Cuartel de Artillería acogió temporalmente a algunas Brigadas Internacionales, de ahí el topónimo que da nombre a esta plaza desde finales del 2015, pues hasta era un lugar sin nombre. Algunos vecinos recuerdan aún “el trasiego de los militares que habitaban el cercano Cuartel”.

Nos contaron que esta plaza tiene un gran potencial para ser un lugar de convivencia ciudadana, por esa centralidad y por ser punto de encuentro de grupos de diferentes edades. Sin embargo, actualmente, ese encuentro intergeneracional no está exento de conflictos generados por el uso del espacio. Los imaginarios recogidos esa tarde húmeda dejan constancia de la preocupación por la falta de “armonía” entre mayores, niños y jóvenes. Así como del deseo de una mejora de la convivencia en estos Jardines, convirtiéndolos en un verdadero espacio comunitario para todos y de encuentro con el otro.

Leer los imaginarios siempre provoca sorpresas. Según ellos, los colores que evoca esta plaza son principalmente dos: el gris y lo multicolor. ¿Pudo cambiar la percepción de este lugar el enorme arcoíris que surgió, tras dos días de intensa lluvia?

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