No es la fiesta por la fiesta, es también el cómo se hace

Lo festivo abre un sin fin de posibilidades. La fiesta es ese lugar en el que nos juntamos y en el que las diferentes comunidades encuentran múltiples formatos para celebrarse. Además de ser un lugar de encuentro, las fiestas también son espacios de enunciación, de los que emergen discursos, poses, acciones, pero sobre todo, las fiestas hacen espacio público, rompen con la cotidianeidad y con los usos habituales que hacemos del espacio público, llenándolo de color, de música, de bailes y de cuerpos.

Cuando estas fiestas no son creadas desde un departamento gubernamental, sino que se generan a partir de la fuerza de vecinas y vecinos, son espacios de producción en común, en los que suele surgir una comisión de fiestas encargada de diseñar todos los detalles de la celebración. Desde el proyecto Fiestas Raras hemos querido emular esa metodología de creación de fiesta, por eso creamos nuestra propia Comisión, añadiéndole la premisa de enrarecer la fiesta, con el objetivo de que ésta fuese un espacio de creación colectiva. No queríamos únicamente contratar una serie de artistas que amenizaran el festejo, sino crear una serie de acciones que llenaran de vida la Gran Fiesta Rara. Estas acciones se han ido construyendo a través de talleres que hemos realizado en común con el vecindario.

Estos talleres que denominamos Haceres Raros son espacios de producción colectiva que están caracterizados por estar abiertos a la participación, cuentan con una artista/colectivo que dinamiza las jornadas de trabajo, una asociación del barrio que acoge las sesiones y apuestan por crear un espacio con el que aprender haciendo una acción final. Es decir, no se trata únicamente de que el artista nos explique cómo puede ser la creación de un baile o de una pasarela precaria, sino generar un lugar de creación colectiva en el que las personas participantes se conviertan también en creadores, construyendo entre todxs ese baile o esa pasarela.

A la vez, la propia Fábrica de Cine Raro, generada en el marco del proyecto Fiesta Raras, ha creado sus propios talleres con idéntica motivación y metodología, apostando por una forma de entender a la ciudadanía, no como mero espectador, sino como creador de sus propios contenidos audiovisuales. Los talleres de la Fábrica de Cine Raro se han encaminado a crear una acción audiovisual colectiva en la que reivindicar la imaginación como detonante del pensamiento. Esta acción, en forma de proyección caminada será la apertura para el resto de actividades de la Gran Fiesta Rara.

En el proyecto Fiestas Raras hemos considerado a la ciudadanía como agentes creadores y aprovechamos el potencial de la fiesta como lugar de enunciación, en el que emergen realidades invisibilizadas y se cuestionan los malestares contemporáneos.

Fotografía: Laura C Vela

<< VOLVER A ENTRADAS